Los primeros días de febrero, tal como informara LUJANHOY, desde la Secretaría de Economía y Finanzas de la Municipalidad de Luján comunicaron que “a partir de marzo de 2019 unos 1.200 inmuebles específicamente determinados de la localidad de Jáuregui deberán abonar la Tasa por Servicios Sanitarios por el servicio de agua corriente, conforme a los montos estipulados según lo establecido en las Ordenanzas Fiscal e Impositivas vigentes”.

Al respecto, desde el área municipal explicaron que “dicha tasa es anual y se dispone por calendario impositivo abonarla en seis cuotas cuyos vencimientos operarán en los meses de marzo, mayo, julio, septiembre, noviembre y diciembre”.

A raíz de esta situación, la Asociación Eco Vida en el Oeste Bonaerense (AEVOB) organizó una reunión que se llevará a cabo este martes a las 19 en el Centro de Pescadores de Jáuregui, ubicada en la calle España 245. En ese sentido, señalaron que se “tratará el tema del cobro de agua en Jáuregui y se explicará por qué hasta ahora no permitimos que se cobrara el servicio. Queremos intercambiar opiniones y esperamos contar con la presencia de nuestros vecinos”.

En este sentido, la vecina Regina Palomar señaló en diálogo con LUJANHOY que “queremos explicar por qué no se pagaba hasta ahora, por qué en su momento cuando se quiso cobrar no permitimos que se cobrara. El motivo era que no estaba terminada la obra y hoy la situación sigue igual: la obra no está terminada. Por lo tanto, consideramos que no cambió nada para que nos cobren el agua. Y eso es lo queremos conversar con los vecinos, si están de acuerdo o no.

“En algún momento el servicio hay que pagarlo, pero cuando estén dadas las condiciones y sepamos que el agua que estamos consumiendo es de buena calidad, que el tanque se está clorando como se tiene que clorar y cuando hagan el segundo pozo con la segunda bomba. Lo que nos habían aconsejado era tener dos pozos, pero se hizo uno de emergencia para tener el agua y el otro nunca se hizo. Y ya pasaron años y se contamina, porque no puede estar siempre en el mismo lugar, hay que ir rotándolo y hay que hacerlo a cierta distancia”, detalló en relación a la negativa del cobro de la Tasa.

Y en esa línea, agregó que “el otro problema es el camino al costado del Ramayón, que es de tierra y cuando llueve no se puede entrar. Y cuando se rompe la bomba un día de lluvia nadie puede entrar a arreglarla. Y el hecho de tener una sola bomba implica también que cuando se rompe estamos dos o tres días sin agua, como nos ha pasado”.