Aunque sea una frase hecha, se sabe que el fútbol es pasión de multitudes. Y por estos días los hinchas del Club Luján disfrutan con el presente del equipo dirigido por Abel Orona, que se encuentra peleando por ingresar al Reducido por el tercer ascenso a la Primera B Metropolitana.
Pero la realidad es que una institución deportiva no es solamente fútbol. Y en el Club Luján en los últimos años comenzó a realizarse un gran trabajo a conciencia desde lo institucional, que incluye un crecimiento patrimonial y también deportivo en todo su conjunto. En ese marco, se concretaron las construcciones de los vestuarios y una tribuna de cemento en el predio del barrio San Emilio, con todo lo que eso significa. Y a eso hay que agregarle el destacado y constante avance de las divisiones inferiores, el fútbol femenino, el hockey y el patín.
A pesar de los tiempos que corren y la crisis económica que se profundiza día a día, a fines de 2018 el Club Luján dio un paso más hacia la finalización de la tribuna de cemento, ya que un grupo de hinchas la pintó y, además, se realizó en ella un mural.
Pero lejos de detenerse, a principios de este año desde el Departamento de Obras e Infraestructura de la institución anunciaron que comenzó la construcción del gimnasio debajo de la tribuna. Y el nuevo espacio, que ya es una realidad, permitirá que lleven a cabo sus entrenamientos tanto el plantel de fútbol profesional como las divisiones inferiores, los equipos femeninos de fútbol y hockey y todos los integrantes de patín artístico.
La gran inauguración
Después de tanto esfuerzo y trabajo, llegó el momento tan esperado: la inauguración. Y tal como habían anunciado desde la dirigencia del Club Luján, fue este sábado con una gran actividad, que congregó a cientos de socios e hinchas.
“Esto que estamos viviendo hoy lo soñaron 12 locos cuando se formó el Departamento de Obras hace tres años atrás. Uno venía al predio y veía nueve, 10 columnas del sueño que tuvo otra gente y nunca se pudo concretar. Yo soy un agradecido de todos los dirigentes que dejaron su tiempo, su familia y dinero, porque ser dirigente del ascenso es dejar todo eso. Y aquellos que hicieron esas columnas soñaron esto. Hoy es un día histórico, porque Peretto va a pasar y otros presidentes van a pasar, pero los ladrillos quedarán”, sostuvo en el inicio de su discurso de apertura el presidente de la institución, Mariano Peretto.
Y agregó que “el éxito deportivo con el tiempo va a venir, porque hoy tener 600 chicos haciendo deportes en el club no es poca cosa. Y necesitamos que todos entiendan que sin educación y sin deporte no hay país que avance. Entonces, apostemos a la educación y al deporte para salir adelante como país, más allá de que en el Club Luján necesitamos que nos apoyen todos. Y si bien soy yo el que agarra el micrófono, este reconocimiento es para el Departamento de Obras del club. Son ellos los que se tienen que llevar este gran aplauso que le van a dar ahora ustedes”.
Y tras los aplausos, el padre Javier bendijo las nuevas obras y solicitó “pedirle a Dios que siga bendiciendo este lugar y a las personas que forman parte de este club y trabajan y dejan todo en este lugar”. Y finalmente, Mariano Peretto realizó el tradicional corte de cintas junto con el intendente Oscar Luciani.
Luego, se mencionaron los equipos conformados por viejas glorias, uno encabezado por Javier “La Mona” Brayotta y el otro por Javier “El Loco” Vallejos. Y tambien los nombres de todas las personas, profesionales y empresas que colaboraron para hacer realidad la construccion de la tribuna y el gimnasio con materiales, mano de obra, rifas y aportes que fueron destinados a la obra.
A continuación, ya con los socios e hinchas en la tribuna, se presentaron los deportistas de todas las disciplinas del club y más tarde las viejas glorias hicieron rodar la pelota sobre el campo de juego de la cancha principal del predio del barrio San Emilio.
Luján vivió una jornada histórica e inolvidable. Y bien merecido lo tiene.