Foto: gentileza Basta de pintadas en Luján

El ejercicio es válido para precisar, con el lógico pesar, cuántas casas en una cuadra han sido atacadas por los irrespetuosos de los aerosoles. No hay recóndito de pared, de zaguán, de alero, de tapial que sea inviolable ante la pintura que llega y le pone fin a la pulcritud o a la limpieza o al deseo de tal o cual color de moda que eligen los propietarios de las casas de nuestra ciudad.

No hay monumento –ni siquiera el más céntrico- inmune a este tipo de accionar. Todos están en la mira. Por todas las superficies pueden pasar las letras que no dicen nada… cuando en realidad hablan y mucho, porque ejemplifican esa falta de respeto a lo ajeno y a lo propio a la vez -lo público-, ese deseo de destruir lo que cuesta tener.

Y con tantos artistas y de excelencia que hay en nuestra ciudad, esos que han decorado de arte calles, espacios públicos o paredes cuyos propietarios han ofrecido para compartir las pinceladas de semejantes manos de vuelo, hay que tolerar que haya otros que a rayas, ensucian todo.

El ejercicio, no está de más. Cuando andemos en colectivo, si andamos a pie, si pedaleamos, si manejamos el auto… a la hora de contabilizar las rayas, las frases inentendibles, los garabatos el número nos va a doler desde esa mirada de desilusión, hay muchos irrespetuosos que se sienten poderosos aerosol en mano.

Foto: gentileza Basta de pintadas en Luján

Desahogarse en Facebook

En una de las redes sociales de mayor popularidad, aparece la página ‘Basta de pintadas en Luján’, un sitio donde los vecinos pueden enviar fotografías de sus propios frentes arruinados o de espacios públicos que hayan sido atacados por estos vándalos. Y con quienes han armado la página, dialogamos para sumar difusión a la misma y que mucha gente pueda mostrar lo que está pasando.

“La página sube fotos de casas, edificios públicos y monumentos pintados. Fue creada en agosto de 2016. Es un espacio destinado a concientizar y repudiar el daño ocasionado por aquellas personas que con pintadas arruinan los espacios públicos y privados de Luján”, nos relataban sus administradores, para agregar: “Contamos con más de 200 fotos que sacamos nosotros y que muchos vecinos comparten.

Además fue ingresado al Honorable Concejo Deliberante un proyecto de ordenanza para erradicar esa modalidad, bajo expediente P/P 27/2016. Nunca lo trataron, al menos es lo que hasta hoy sabemos”, mencionaban con la lógica amargura de no contar con el respaldo de los funcionarios en una temática que es relevante a la hora de la educación.

“En tantas imágenes hemos detectado algunos seudónimos de ‘grafiteros’ como Otti, Salvo, Sügar, Paréntesis, Nano, que sin tener consciencia de los costos que conlleva arreglar el frente de una casa, en tres segundos la arruinan”, decían, agregando: “Hoy la tecnología nos puede ayudar a dar con esta gente, ya que hay videos en donde se ve su accionar. Andan principalmente de noche, en grupos y en un recorrido te arruinan varios frentes”, decían para señalar algunos casos puntuales.

“Hay una casa en la calle Ferrocarril Oeste que tiene el frente pintado con ‘Revear’, color salmón. Un día apareció la frase ‘Pintalo de negro’, a la semana ya tenía otro graffiti más. El dueño de esa casa tendrá que volver a pasar ese sistema de recubrimiento para taparlo y el costo es tremendo. Hay otra casa en Sarmiento y Avenida España a la que le pintaron la persiana de madera, es decir, no solo hacen daño, sino que hay maldad, porque además no son niños que no comprenden, son jóvenes que saben que ese daño conlleva mucho dinero para los arreglos. Eso es maldad”.

¿Qué sentirán cuando se los nombra? ¿Quizás esa fama que de otra buena manera no pueden alcanzar? ¿Se sentirán impunes sabiendo que no hay leyes que contemplen esta actividad como un delito contra la propiedad privada y pública?

A la espera que el Concejo Deliberante algún día trate el proyecto de ordenanza, están todos los ciudadanos restantes que no ensucian ni destruyen, que también son muchos.

“Invitamos a los concejales y autoridades a que elijan una calle de Luján –cualquiera- y la caminen de punta a punta. Y en ese recorrido recuerden cuántas casas están pintadas con aerosol. Se van a asombrar cuando vean los números”, señalan desde la página ‘Basta de pintadas en Luján’, página a la que todos los damnificados y aquellos observadores, indignados, pueden entrar y compartir las imágenes de las rayas sin sentido estético ni con mensajes claros, que arruinan las casas, monumentos, paredes.

Esperando que en este tiempo de elecciones los candidatos políticos no sumen enchastres por doquier, auguramos una ordenanza que juzgue como corresponde el constante gesto irrespetuoso de rayar paredes.

Nota: Lili Ricciardulli