En el expredio del Ferrocarril, allí en la manzana de las calles Belgrano, Ituzaingó y Las Heras, la educación tiene pista libre para forjarse en el aspecto vial, desde la niñez. Un trabajo apuntalado por el Rotary Club Luján que se puso en marcha este martes.

Flameaban las cintitas desde los manubrios de las bicis. El pequeño semáforo -réplica del sistema que deberíamos todos tener tan, tan en cuenta siempre- hablaba en su idioma de colores y decía en rojo, amarillo y verde qué hacer en cada ocasión. Un cúmulo de carteles en dimensiones pequeñas eran las tan grandes en importancia señales de tránsito. La pista, flamante, maqueta de calles con toda su extensión para transitarla con el mejor de los objetivos: disfrutar y aprender.

Y allí, listos para poner primera y arrancar, los chicos de los Jardines de Infantes N° 920 y Negrito Manuel, con sus guardapolvos en movimiento y esa capacidad de absorber cada una de las cosas que los grandes les ofrecemos… y si nos miran, si nos observan, si nos escuchan y ven, qué importancia cobra el transmitir con los mejores ejemplos.

En el tema del respeto vial, fundamental. Moverse en la vía pública haciendo efectivo el respeto en un espacio donde nos movemos todos. Y por cada uno, desde cada uno y para todos, transitar de manera correcta hace la gran diferencia hacia esa esperada y necesaria mejor convivencia.

Visionarios educadores que siempre han venido hablando y difundiendo el tema. Entidades que avalaron la idea y fueron sumando su labor organizativa y de esfuerzo solidario. Particulares que sumaron su mirada, opinión y concreciones. Y un Municipio que aportó el aval y la materialidad para darle finalmente luz verde al proyecto de contar con una pista de Educación Vial para que las instituciones educativas de nivel inicial utilicen en pos de fomentar el respeto cuando somos parte del tránsito como peatones o conductores de diversos medios de locomoción. Una más que bienvenida actividad educativa tan necesaria ante la triste realidad del manejo diario.

Luz verde

Un semáforo en verde que anunció el inicio de este proyecto concretado y puesto en marcha este martes 3 de diciembre a las 10, cuando en el predio de los “galpones” donde el Municipio tiene diferentes dependencias, los propulsores -el Rotary Club Luján- dejó inaugurado el Parque Infantil de Educación Vial. Y de aquí en más, a transitarlo.

“Los objetivos que han llevado a la construcción de esta pista son el educar y generar conciencia desde la edad temprana y producir un cambio en la actitud frente a la importancia del cumplimiento de las reglas en todo el rango etario, mejorar la circulación y la calidad de vida de los ciudadanos, reduciendo los eventos de inseguridad vial, los que de por sí son costosos al Estado municipal y al cuerpo de Bomberos Voluntarios, cuya actividad no está enfocada a la atención de emergencias viales, pero es su vocación de servicio la que siempre está atenta”, decía el presidente del Rotary Club Luján, Jorge Dovico.

Y agregaba datos de suma importancia para esta toma de conciencia: “Los accidentes de tránsito ya no son eventos esporádicos en nuestro país, tampoco lamentablemente en nuestra ciudad, han pasado a ser una de las principales causas de muerte, por lo que es necesario que el tema sea tratado con responsabilidad por todos los actores de la sociedad, siendo las escuelas una de ellas ya que son los niños los actores principales y agentes multiplicadores de los buenos ejemplos y prácticas. Serán ellos los conductores del futuro”.

A su vez, Dovico enfatizó: “Nos espera un trabajo arduo y continuo ya que son 3.000 los niños que asisten a Jardines de Infantes y que recibirán las charlas y prácticas”. Y por último, dijo que “tenemos el compromiso, pondremos nuestras capacidades y trabajo para poder ver, en función de estadísticas, la disminución de accidentes y así estar orgullosos todos del beneficio que trajo el esfuerzo de comenzar hoy con un proyecto ambicioso”.

No faltaron por parte de Rotary y en la voz de su presidente, los agradecimientos a empresas como Grúas Huici, Erinland S.A, Autopistas del Oeste y al Municipio de Luján por la decisión política de ceder el espacio y avalar tal construcción, aportando además la mano de obra de diferentes empleados del área como así también a diversos ciclistas que desde su especialidad de ‘Rural Bike’ se sumaron a las actividades en diferentes eventos para recaudar los fondos necesarios para este Parque Infantil de Educación Vial.

Ciclistas como Javier, Emanuel, Carlos, Jazmín, que se hicieron presentes. “Nosotros como ciclistas tenemos que aprender mucho. Los semáforos no son solo para los automovilistas, muchas veces creemos que con luz roja podemos pasar porque vamos en bicicleta, y no es así, tenemos que respetar los ciclistas las señales de tránsito como todos”, nos decían en una autocrítica que simboliza está bienvenida y necesaria toma de conciencia.

Por su parte, el intendente Oscar Luciani, ante la inauguración, destacaba la importancia de la puesta en funcionamiento de este espacio educativo: “Este parque vial es para nuestros niños, porque ellos serán nuestros inspectores de tránsito, dado que nos van a indicar cuándo cometemos alguna equivocación”, señalaba instando al seguir nosotros como adultos aprendiendo en la temática vial, materia pendiente para una gran cantidad de personas.

“Aprendamos todos, porque los adultos todavía tenemos que seguir aprendiendo de nuestros niños. Este Parque es de todos los lujanenses para que a futuro podamos disminuir los accidentes y salvar más vidas”, remarcaba el jefe comunal y reconocía al personal municipal que se encargó de la mano de obra, a los que propulsaron la idea, a quienes aportaron desde diferentes espacios, a los integrantes del Rotary Club Luján.

Y tanto Luciani como la gente rotaria mencionaron la labor inmensa en esta temática desde la década del 90 del señor Atilio Missio, referente en cuanto a educación vial se trata.

También, en diálogo con LUJANHOY, el exsubsecretario de Control Urbano de la Municipalidad, Francisco Passini, manifestó: “Esto se empezó a materializar desde el año 2016, fue un gran trabajo del Rotary, por eso el reconocimiento a ellos, porque esto fue básicamente poner recursos a disposición, ya que la voluntad, las gestiones para conseguir este espacio que lo tenía la Policía y que estaba ocupado por autos secuestrados, fue trabajo todo de ellos. Hay una necesidad evidentemente en cuanto a la educación vial en la sociedad y hay que crear conciencia, acompañando el criterio de que el punto de inicio donde hay que crear esa conciencia son los chicos”.

Y agregó que “esto es algo que le viene bien a todo Luján y no tiene un color político. Por suerte la Municipalidad tiene personal de carrera, capacitado, que le gusta poder enseñarle a los chicos, así que esperamos que tenga continuidad seriamente y se pueda mejorar”.

De esta manera, con la presencia de autoridades municipales, miembros de Rotary Club Barnech y Julio Steverlynck, con integrantes de la Rueda de Familia del Rotary organizador, con personal de tránsito del Municipio, con alumnos, docentes y directivos de los jardines N° 920 y Negrito Manuel, sus familias y sus bicicletas, la luz verde dio inicio al primer recorrido por la educación vial, actividad que se realizará de aquí en más con todos los alumnos del nivel inicial del Distrito.

Luz verde, pista libre para el aprender. Señales en la conciencia. Disfrute de la vía pública, recorrido valioso por la tan necesaria educación vial, en las calles que si bien tienen diferentes sentidos de manos, son idénticas en uno: el sentido del respeto.

Objetivo del proyecto

En primer lugar, los objetos beneficiarios del proyecto serán los niños. Y en instancia indirecta, adultos conductores y la comunidad en general también son partícipes y beneficiarios.

Asimismo, la idea de este parque es la siguiente:

• Trasmitir a los niños los conocimientos básicos sobre cómo desempeñarse circulando en la vía pública como peatón, como pasajero y como conductor y cuáles son los aspectos, roles y responsabilidades de cada figura a través de juegos.

• Integrar a los distintos actores de la comunidad sobre la situación vial: instituciones educativas (alumnos, docentes), cuerpo de bomberos, responsables de la Subsecretaría de Control Urbano (funcionarios y oficiales).

• Educar y concientizar sobre el comportamiento en la vía pública a través de ejercicios prácticos en campo (en el parque vial) y a través de clases teóricas.

• A largo plazo, reducir el número y gravedad de los eventos relacionados a inseguridad vial.

Nota: Lili Ricciardulli