El grupo de vecinos que nació bajo el nombre de “Recuperemos la Plaza Colón”, hoy conformado como Asociación de Amigos, continúa su tarea. Y en este inicio de año las farolas y la “Dama del Agua” son el objetivo de restauración. Además, se reunieron con el intendente. La palabra de quienes realizan este tan necesario trabajo de transmitir toma de conciencia de cuidar los espacios públicos.
La mala noticia primero, para luego poder desandar la nota con la descripción de los buenos gestos: el mismo día en el que se realizaron diversos trabajos culminó con vandalismo, ya que el inicio de la reparación de la estatua de “La Dama del Agua” fue destruido.
Alguien, algunos, esos que parecieran no tener nombre ni rostro, acudieron a deshacer los laboriosos intentos de la gente solidaria, que pusieron horas, ganas, trabajo en la tarea de restauración. Una vez más, a recomenzar la tarea. Ojalá que los que destruyen, aprendan a convivir y los que colaboran para la mejor postal para ojos y almas, tengan siempre las ganas de seguir haciéndolo.
Previo a ese momento nocturno de vandalismo, se vivió en la Plaza Colón una gran jornada de trabajo, protagonizada no solo por la gente de la Asociación de Amigos, sino de un grupo de jóvenes que se sumaron a la iniciativa de poner en valor las farolas de iluminación y la tradicional “Dama del Agua”.
“El grupo está de ánimo y más aún cuando se proyectan trabajos. Y el apoyo de los vecinos hace que se potencie ese ánimo”, comenzaba contándonos Esteban Pontaquarto, quien preside esta Asociación y se encarga de visualizar las tareas desde la página de Facebook “Recuperemos la Plaza Colón”.
“La restauración de la ‘Dama del Agua’ era una materia pendiente. Fue destruida en 2016 y así quedó. Asesorados por una escultora, comenzamos a repararla. Es todo un desafío que valdrá la pena. Y en simultáneo, con la ayuda de un grupo de chicos, se están pintando las 46 farolas. Tarea ardua no solo por la cantidad, sino por el formato. Si el tiempo acompaña posiblemente en un par de días se terminará”, decía Esteban en el mediodía del jueves 16 de enero, cuando el sol y el calor quedaban de lado ante el ir y venir de las lijas, los pinceles, el moldeado de formatos para restaurar la estatua, la solidaridad adolescente y la guía de los adultos, una combinación digna de aplausos.
Entre todos, lo que es de todos
La Asociación -que resulta un grupo de vecinos independientes-, lógicamente desde su fundación ha tenido contacto con el Municipio, algo que acaba de suceder ante el cambio de gobierno en nuestra comuna.
“Hace una semana estuvimos con el nuevo intendente, nos presentamos y le contamos nuestra labor. Ante nuestro pedido de más cámaras, Leonardo Boto solicitará la instalación de dos más en el interior de la plaza. Además nos volveremos a reunir para armar un plan de trabajo junto a gente del área. Coincidimos en la importancia de la plaza, su valor histórico y lo importante de protegerla, preservarla”.
Y en este tan, tan necesario trabajo de transmitir toma de conciencia de cuidar los espacios públicos, señalaba: “Como allá en nuestros inicios, 2013, insistimos con el cuidado, la protección. Hay gente (la minoría) que no la cuida, rompe, daña. Se suben a la fuente, pisan el escudo, rompen las tulipas de las farolas, rayan bancos, etc. Este tema hay que solucionarlo porque por más que se hagan cosas, volvemos a cero”.
Una triste postal también de la realidad de falta de respeto por lo que es un bien común a todos, un espacio como corazón de la ciudad que conserva por entre sus follajes, caminos y construcciones la historia lujanense en sus miles de historias personales. Y precisamente, como testigos de cada día, la vida que la habita: las aves.
“La diversidad que tiene esta plaza es fantástica. Hay que tomarse un ratito para poder disfrutarla. Decenas de especies arbóreas atraen muchas aves, algunas muy atractivas como el ‘bicho feo’ o el colibrí”, mencionaba Esteban luego de una jornada de trabajo solidario de adultos y jóvenes.
Ejemplo que debemos mostrar y admirar, para que cuando suceda lo otro, esos otros gestos nefastos, podamos saber que las buenas manos en las buenas tareas, siempre tienen que ganar. Apoyemos, cada quien de esta comunidad, esta tarea de tener el corazón que es la plaza, cada vez más lindo.
Nota: Lili Ricciardulli