Los creyentes le habrán rezado apretando las manos entumecidas y las panzas vacías y el dolor en el cuerpo y la tristeza en el alma, pero también la valentía en ese corazón de combatientes, allá en el sur. Y los no creyentes seguramente habrán guiñado con un acercamiento sincero a la fe de sus compañeros, para el definitiva, estar todos bajo el manto de la Virgen de Luján.
Hoy, estos hombres -aquellos muchachos- siguen sintiendo la calidez de la Santa Patrona de los argentinos, que ahora los acompaña en este andar de misión malvinizadora, a diario.
Tal como contáramos en una anterior nota, ex combatientes -integrantes de la Sala Permanente de Malvinas- luego de hacer bendecir las imágenes de la Virgen de Luján, partieron hacia tres provincias para dejarlas allí, ante la mirada y los rezos de sus compañeros ex combatientes.
La primer posta se concretó el lunes 15 de febrero, cuando en el centro cultural “José La Vía” de la ciudad de San Luis, se llevó a cabo un acto de recibimiento para la delegación lujanense, acto que compartieron con el Centro de Ex Combatientes “2 de abril” de la ciudad anfitriona, presidido por el VGM Osvaldo Lucero.
“Mucha emoción, y más que dejamos la imagen de la Virgen en nombre de nuestra ciudad”, contaba a LUJANHOY Julio Mena, integrante de la Sala Permanente de Malvinas.
La segunda entrega se realizó unos días después en San Juan, poniendo en manos y ante el corazón de los veteranos de guerra de la provincia, el tan sentido presente, donde el acto fue declarado “de interés provincial”, llenando de orgullo a la causa y a través de ella, a los ex combatientes lujanenses que en la recorrida, fueron portadores de Fe y memoria.
Un final de travesía a todo Malvinas
La última posta correspondió a hacer la entrega de la imagen en la provincia de Mendoza, cuando el día 23 de febrero las manos de los héroes de nuestra ciudad pusieron cálidamente en manos de sus compatriotas mendocinos, ese tesoro de Fe, en un encuentro que se llevó a cabo en el Colegio religioso Rodolfo Bufano, de San Rafael, donde se unieron las emociones de esta travesía en un círculo que seguirá girando ante la inacabable decisión de malvinizar, como parte del legado de los héroes de la guerra del Atlántico Sur.
En febrero, la historia de Malvinas recorrió una parte del mapa trazando de esta manera el sentimiento de Malvinero, materializado en la imagen de la Santa Patrona de los argentinos.
Por siempre, Malvinas, fe y memoria.