Tras las nuevas medidas anunciadas por el Presidente de la Nación, Alberto Fernández, para frenar la segunda ola de coronavirus, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, afirmó hoy que “se va a acatar al pie de la letra” lo dispuesto por el gobierno nacional.

“No es una ola, es un tsunami”, dijo el mandatario bonaerense al referirse a la situación sanitaria en territorio provincial y advirtió sobre la “impresionante velocidad de crecimiento” de casos de coronavirus en los últimos días.

“En las últimas tres semanas pasamos de 2.500 casos a un promedio de 6.000. No es sólo lo súbito o la velocidad, sino la magnitud”, consignó Télam respecto de las declaraciones de Kicillof al encabezar una conferencia de prensa en la sede de la Casa de Gobierno.

“Es una segunda ola feroz. Si no se toman medidas, si no se cambia nada, hay que suponer que todo sigue igual y los casos crecen”, añadió y valoró que el Jefe de Estado “tome las medidas priorizando la salud de los argentinos”.

Luego, advirtió que se “corre el peligro de que se sature el sistema sanitario”. Y añadió que unos 40 distritos que se encuentran en Fase 3 -aquellos en donde se registran mayor cantidad de contagios- tendrán “cierre de locales de gastronomía de 23 a 6; prohibición de circular desde las 0 a las 6, y un cierre de comercios en general desde las 20 a las 6 de la mañana”. Entre esos distritos se encuentra Luján.

Por su parte, Kicillof remarcó que se aplicarán “severas multas por incumplimientos” y explicó que ese sistema sancionatorio requerirá de adhesión municipal.

Y si bien planteó que “habrá seguimiento, control y sanciones”, aclaró que “no puede haber un Policía al lado de cada persona”, motivo por el cual solicitó “colaboración y conciencia” a los ciudadanos.