La tarde les cayó encima, como si pudiera determinar en ese rato de las 16, el destino diferente al pensado. Porque todo fue fuego y ese fuego no paró hasta no devorar todo lo que pudiera: techos, paredes, puertas, muebles, la ropa y seguro juguetes también.

Y además del chirrido de todo lo material crujiendo, hubo ladridos ante el desconcierto, ladridos como aullidos luego, cuando las mascotas de la familia también desde su instinto vieron el peligro en esta tarde del lunes que se cortó al medio y puso llamas y dejó cenizas.

Toda ayuda sirve

Después del fuego y después de no quedar nada, llegó la primera noche sin casa y con todo el frío y la familia -numerosa- se trasladaron a casa de familiares para este “mientras tanto”, con dolor por todo lo perdido y la urgencia de la ayuda de la comunidad.

Fernando, uno de los damnificados de la familia, dialogó con LUJANHOY y brindó detalles de las necesidades: “Nada quedó. Nos hace falta de todo un poco. No conseguimos nada hasta ahora”.

Fernando forma parte de esta familia con hermanos que van de los 2 a los 22 años, para los cuales se necesita todo tipo de indumentaria y calzado, teniendo en cuenta lógicamente que sea ropa de abrigo.

“Gracias a Dios no hay nadie lastimado”, aseguraba Fernando, al tiempo que sumaba: “Los perros están con un poco de hambre, pero están bien. El alimento lo puedo comprar yo, pero ayuda también si conseguimos donación. Gracias!”, decía sobre esa solidaridad que también piense en sus animales, numerosos y muy queridos.

Se vendrá además un tiempo de reconstrucción, por lo que al listado de ropa, muebles, electrodomésticos, alimento para la familia y sus animales, sería de mucha utilidad y urgencia que se sumen todo tipo de materiales para volver a poner en pie, ladrillo a ladrillo, chapa a chapa, a toda arena y cemento, el hogar de esta familia que hoy nos necesita.

Para colaborar, contactarse con Fernando al (2323) 365213.