Luján recibió este sábado a representantes de las diversas fuerzas políticas de orden nacional, así como a referentes de movimientos sociales, organizaciones sindicales y asociaciones empresariales, que se acercaron a la Basílica Nacional Nuestra Señora de Luján para participar de la Misa por la Paz y la Fraternidad de los argentinos, celebrada por el arzobispo de Mercedes-Luján, monseñor Jorge Eduardo Scheinig
Impulsada por el intendente Leonardo Boto y organizada por el Municipio, el oficio religioso se realizó atendiendo la convocatoria de la Conferencia Episcopal Argentina a través de la recientemente publicada Carta a los Obispos.
La misma exhorta a la ciudadanía a “unirse en la oración que cura las heridas, levanta la mirada y nos hace testigos de fraternidad y diálogo sincero” e insta a los responsables de las distintas dirigencias “a reconocernos y encontrarnos en una oración por la paz social y el diálogo”.
Al respecto, Boto sostuvo que “no podemos seguir con este nivel de crispación política y agresión porque el pueblo argentino nos demanda que trabajemos por el bienestar y la paz social”.
En esa línea, consideró que “hemos llegado a un punto que debe ser considerado como un límite, a partir del cual los dirigentes de los distintos espacios empecemos a construir un camino de diálogo fructífero y consensos básicos que revitalicen la convivencia democrática”.
Por último, dijo que espera que “esta oración fraternal de agradecimiento a nuestra querida Virgen de Luján, la patrona de todos las y los argentinos, nos de la fuerza y la humildad necesarias para emprender esta tarea”.
La Misa por la Paz y la Fraternidad de los argentinos contó con la participación del presidente Alberto Fernández y su gabinete de ministros; el expresidente Eduardo Duhalde, el gobernador bonaerense Axel Kicillof y su gabinete de ministros, intendentes del oficialismo y la oposición, diplomáticos, diputados nacionales y provinciales, sindicalistas y representantes de distintos cultos, además de vecinos y vecinas que acompañaron el oficio religioso.
En su homilía, Sheinig destacó “Para estar a la altura de las circunstancias tan difíciles y delicadas que estamos viviendo, debemos esforzarnos en salir del paradigma del encierro y del rechazo y entrar en el paradigma de la apertura, el abrazo y el cuidado de toda persona”.