Muchos vecinos llegan para recibir el gesto solidario de Stella desde el Comedor “Una luz de Esperanza”

No hay sillas, pero las largas mesas prestadas por los mismos vecinos, quedan rodeadas por la alegría de compartir algo fresco y algo rico y dulce en estas tardes de verano en las que el Comedor “Una luz de Esperanza” ha incorporado este momento de merienda sumando así otro servicio solidario a la ya tradicional tarea del Comedor en sí.

Por eso, aún cuando les faltan sillas, cada lunes, miércoles y viernes de 18 a 19 reciben a más de 20 chicos que comparten alrededor de esas mesas, el momento de saborear y además, un rato de entretenimiento, en este espacio solidario del barrio Ameghino, creado por Stella Altamirano en el año 2017.

Y con Stella hablamos acerca de estas tardes de merienda y de la campaña que ya se inició para lograr conseguir útiles escolares.

“Ahora además de la actividad del comedor, tenemos un grupo de unos 25 chicos que vienen a tomar la merienda acá, les hacemos tipo un recreativo de una hora más o menos y después les damos la merienda con lo que tenemos en ese momento, galletitas, jugos, las donaciones que van entrando. Después, por ejemplo hoy, hicimos sorteos de 5 juguetitos de nenas y 5 de varones para entretenerlos”, señalaba Stella.

Y agregaba una situación que hace aún más valiosa la tarea: “La merienda la toman parados porque no tenemos bancos y las mesas me las prestan los vecinos pero re lindo la pasan los chicos. Toman algo fresco y se van re contentos”. No hay sillas. Pero hay solidaridad. Hay latidos de corazones que unidos, cambian para mejor, el día.

Necesidades ante el inicio de clases

Pensando ya en el marzo venidero y en la imposibilidad de muchas familias de poder equipar a sus hijos de los útiles escolares necesarios, desde el Comedor ya se inició una campaña para poder afrontar la situación.

“Ahora empezamos a hacer una campaña solidaria para los chicos que más necesitan, así que todo sirve, aunque sea un lapicito de color, usado, acá las chicas arman cartucheritas y los ponen ahí para que los chicos puedan tener para empezar las clases. La situación económica en el barrio no está nada bien, así que quiero ayudar aunque sea aportando eso para los chicos”.

Lápices, fibras, carpetas, cuadernos, sacapuntas, tijeras, gomas, reglas… tesoros de la infancia que algunos no tienen. Tesoros materiales que acompañan al gran tesoro de la educación.

¿Colaboramos? Se pueden contactar al teléfono (2323) 354540 o acercándose a la calle Ameghino 2967.

Los chicos del barrio Ameghino seguro esperan un marzo con la alegría de tener cartuchera lista para la hermosa actividad de la escuela.