Llegó de lejos algún graznido, recortando los aires nuevos para posarse hecho tinta, sobre un papel. Abrió las brisas el trino de algún septiembre llegando al junio de hoy, cantándonos historias de aves y cielos, de árboles y tierra, de plumas, pelajes, hojarasca, ciclos, verdes, aromas, decires de vidas animales, ahondando en la certeza de todo aquello que tuvimos, lo que tenemos, lo que hay que conservar para poder seguir, sostener y reivindicar un ambiente compartido de la mejor manera.

Hay una naturaleza que no es solo nuestra. Que es casa y tesoro de la vida que se manifiesta en la fauna y la flora, de la que dependemos y de la que cotidianamente tenemos la posibilidad de aprender.

Conocer desde aquellas especies hasta las especies de hoy, nos hace parte de la necesaria toma de conciencia acerca de este ambiente compartido y nos pone a todo asombro y disfrute teniendo en cuenta las maravillas que aletean, saltan, corren, galopan, perfuman, crecen, producen y sostienen el incesante ciclo de la vida.

Y ponerle trazos a la naturaleza, verla y sentirla en crayones, recuperarla en un dibujo, eternizarla en un cuadro, sumarle voz humana a lo que nos dice ese graznido, aportarle manos de protección a las alas rotas, ofrecer un exquisito cúmulo de enseñanzas para el conocer y respetar más a la naturaleza, fue la premisa de esta muestra inaugurada el viernes 9 de junio en el Museo de la Ciudad (Edificio La Cúpula), que cuenta con casi 50 obras realizadas por Daniela Ruiz desde la disciplina del dibujo y el material de observación aportado desde la práctica investigativa de Corino Griffini, quienes conformaron la muestra “Flora y Fauna del Luján”, que continúa expuesta hasta el 7 de julio y de la que sus propios autores señalan: “Los sentidos y el conocimiento al servicio de la naturaleza”.

Dibujar vida

Parece que hay latidos sobre el papel. Los trazos marcan límites de cuerpos pero hay algo más que los delata como parte del ecosistema: es esa precisión con la que la profesora Daniela Ruiz los ha retratado. Hay emotividad, entonces, se dibuja vida.

“Yo empecé a dibujar a finales del 2019, luego vino la Pandemia y ahí me pongo a dibujar de lleno, siempre lo hice desde chica, pero en este último tiempo, ahora de adulta, de manera más continua. El dibujar animales es mi especialidad”, nos contaba la docente de Historia y dibujante.

“Empecé a dibujar las aves de la Región Pampeana y se dio que del Museo de la Ciudad vieron los trabajos que había hecho, muchas especies de aves de la región, entonces me propusieron el tema de Flora y Fauna. Ahí hablé con el naturalista Corino Griffini, que estuvo de acuerdo en darle forma a esta muestra y fue quien le puso el nombre de ‘Flora y Fauna del Luján’ y es ‘del’ porque mostramos cómo era también el ecosistema en otros tiempos”, señalaba Daniela mencionando a gente del Museo como Betty Lázzaro, José María Scarnato, Nesty Solá, el arquitecto Rampazzi, entre otros, que entusiasmaron, aportaron sus conocimientos y organización para este evento de arte y naturaleza que contó con el merecido reconocimiento del Concejo Deliberante, que lo declaró de “Interés Cultural”.

“A la muestra le pusimos un código QR para que se escuchen los sonidos de las aves y de los mamíferos también”, decía la autora de los dibujos que representan fauna y flora de esta región, que además estuvo enmarcada dentro de la posibilidad de observar plantas autóctonas que fueron facilitadas para su exposición por un vivero de la zona. Todo en un clima amenizado con música, una presentación con las palabras de Daniela, la escucha de sonidos de animales que se entrelazaron con las imágenes y con la palabra educativa de Corino Griffini, que desde su inmensa capacidad de transmitir información y valores de la naturaleza hizo de la muestra, un momento de aprendizaje y toma de conciencia.

Ver para aprender

La observación, sin dudas, nos pone a pensar. Y ahí está también el sentido de esta muestra. Ver, conocer, aprender y valorar el ambiente natural que nos rodea, conociendo también cómo fue hace mucho tiempo atrás.

“La muestra también les viene bien a los nenes chiquitos, para que tomen conciencia del valor de los ecosistemas, la belleza que tiene y todo lo referente a la naturaleza. Para que se tome conciencia también del origen de las especies de Luján”, argumentaba la docente y dibujante.

Y recordaba palabras vertidas por Griffini: “Hay dibujos de aves, de algunos mamíferos y de algunas las plantas de la región pampeana donde nosotros nos encontramos y así podemos ver cómo era todo antes que llegáramos nosotros y con esta impronta antrópica cambiáramos un poco el fenotipo del ecosistema”.

Con la vista y los trazos puestos ya en la próxima exposición que será en la Casa de Ameghino, Daniela invita entonces a acercarse de 9 a 15 al Edificio La Cúpula, donde hay dibujos que tienen cielo y vuelo, plumas y pelajes, huellas en tierra, hojas, raíces y mensaje oportuno siempre: a la naturaleza se la observa, se aprende de ella y se la respeta.