Se llevaron el vientito con sonido a risas. Ese que soplaba en esa esquina, ahí arremolinando la infancia de colores y aprendizajes del Jardín. Alguien, algunos, tomaron ese vientito construido a guardapolvos resbalando por la altura y lo escondieron por entre las sombras de la noche y la postal del mal ejemplo.

Y ahora, el Jardín de Infantes 916 “Bomberos Voluntarios de Luján” se quedó con unas cuantas, muchas risas detenidas, esperando volver a tener ese juego que les pertenecía y disfrutaban en cada recreo.

El hecho -sin una fecha exacta de concreción- pudo haber sucedido durante el fin de semana del 3, 4 y 5 de noviembre, estando la institución educativa en espera de la visualización en las cámaras del COM para tener datos certeros y que el accionar policial encuentre a los ladrones y se recupere lo robado: dos toboganes de plástico duro y colorido que forman parte del espacio de juegos de la institución ubicada en Leiva y Constitución.

“La última semana de octubre encontramos que había un agujero en el alambrado, estaba cortado el alambre y un papá lo arregló en el momento. Y ahora, pasó esto, las maestras vieron el lunes cuando llegaron los juegos ubicados raros en el patio, como si los estaban preparando para llevárselos, porque estaban muy cerca del alambrado”, contaba a LUJANHOY la directora del Jardín Daniela Zolecio, con la docencia hecha dolor por estos días.

“Más que nada, quiero destacar el esfuerzo que lleva para obtener los materiales para los Jardines estatales, que si bien nos mandan muchas cosas también o conseguimos algún subsidio, en este caso justamente esos toboganes se habían conseguido hace años con un subsidio pero si hoy los tuviéramos que comprar, la realidad es que sería imposible”, sostenía.

Y detallaba: “Estuve viendo el precio y uno solo de esos toboganes cuesta $170.000. Cuántos eventos, cuánto trabajo tendría que hacer la Cooperadora para recaudar el dinero de un solo tobogán?, es imposible. Así que apelamos a la colaboración siempre de la comunidad que por suerte siempre está, participan de cada evento, pero reponer esos juegos es imposible”.

Alerta: no comprarlos

Por estos momentos, desde el Jardín se ha difundido el alerta para que ante el posible ofrecimiento de los toboganes a la venta, nadie los compre y de aviso a la institución.

“La verdad que es muy triste, se roban algo que pertenece a la comunidad educativa del Jardín, que en definitiva es de y para los nenes”, decía Daniela, con la voz de la desazón describiendo la imagen de la inseguridad.

Ahora, el vientito de esa bajada colorida, se detuvo. No hay toboganes en el Jardín de Infantes 916.