Con la Asamblea Ecoambiental Luján y el Movimiento para el Reconocimiento y Transformacion del Pueblo como anfitriones, este viernes, sábado y domingo se realizará en Jáuregui el 36° encuentro de la Unión de Asambleas de Comunidades (UAC).

Participarán asambleas, comunidades, colectivos y personas interesadas en “articular estrategias y acciones colectivas para la defensa de los bienes comunes y los territorios y para seguir construyendo redes de manera horizontal, autogestiva, fraterna, apartidaria y constructiva”, señalaron.

La Unión de Asambleas de Comunidades (UAC) es un espacio de intercambio, discusión y acción conformado por asambleas, grupos de vecinos/as autoconvocados, organizaciones autónomas no partidarias ni vinculadas al aparato estatal y ciudadanos/as en general, reunidos “en defensa de los bienes comunes, la salud y la autodeterminación de los pueblos, amenazados por el saqueo y la contaminación que el avance de diferentes emprendimientos económicos va dejando o pretende dejar a su paso”.

Desde la UAC manifestaron que Jáuregui es un “territorio atravesado por la contaminación industrial, el modelo del agronegocio, el basural a cielo abierto más grande del país, la devastación de bosques nativos por parte del negocio inmobiliario, el avance de la obra pública sobre humedales y la ribera”.

En esa línea, expresaron que aquellas personas que “luchamos por defender el territorio, los pueblos y los bienes comunes tenemos una tarea fundamental para forjar una propuesta de transformación hacia el Buen Vivir, sin zonas de sacrificio, ni comunidades sacrificadas. Pensar y accionar en colectivo, fortalecer los espacios asamblearios, buscar caminos para las articulaciones, para manifestarnos contra los crímenes perpetrados contra la casa común y la humanidad. Sin perder el sentimiento genuino, puro que nos lleva a abrazarnos, comprendernos, como cuerpo territorio”.

Y agregaron que luchan “contra el saqueo, la contaminación y la destrucción de los territorios, propios del sistema capitalista, reafirmando la autodeterminación de los pueblos, buscando asamblear el mundo”.

Y completaron: “La UAC se construye a sí misma en su encuentro, en su accionar, en su producción dinámica y colectiva de un mensaje que propone detener la destrucción de seres y ambientes (considerados como un todo), que revisa el modo hegemónico actual de producción y consumo, piensa nuevas formas de existencia y relaciones en el planeta. No tiene una existencia autónoma por encima de quienes la conforman. No existe un comité directivo, ni de gestión, ni autoridades, ni voceros. La diversidad de individualidades es vital, de lo contrario el crecimiento se detiene”.