Un poco o todo, se es en un libro. Se habla con uno mismo, se construye un diálogo inaudible pero cierto con quien lee. Se expone el sentir y se hace la mirada de a palabras, para entregarlas, para sostenerlas en el otro.
Es esa camaradería de renglones, es ese momento compartido de hojas, esa esa invitación, cita y paisaje al mundo igual que es distinto cuando un libro, habla. Porque ahí hablan las letras, las del autor, las del cúmulo de gente que lee. Y si el autor siente, todo traspasa, llega, vive. Así siente Luciano Cavido, autor de éste -su séptimo libro- que acaba de presentar el pasado 2 de noviembre en instancias de la Feria del libro de Luján.
“En la imposibilidad de decirlo todo, se halla la necesidad de seguir escribiendo. Se hace poesía desde la carencia. Se escribe porque la realidad nos sobrepasa. Pero la poesía tiene un elemento fundamental que es la metáfora. A través de ella, la palabra cobra diferentes sentidos y nos podemos acercar a una sensación de totalidad. Quizás un solo poema lo abarca todo y eso es nuestro consuelo”, comenzaba describiendo para LUJÁNHOY Luciano, en esta charla franca y amena, tal como acostumbra el artista lujanense que ofrece su palabra y sentir como quien se ofrece íntegro.
“Es mi libro número siete. Y es un libro muy especial porque hacía varios años que no publicaba por lo tanto este libro recoge poemas de diferentes épocas creativas. Tiene 125 páginas y contiene más de treinta poemas de diferentes extensiones. Dado que narran historias y estas son a veces de diferente tenor”.
Se crea el tiempo
A veces difícil de encontrarlo, pero para Luciano es decisión impostergable: tiempo para crear, música, historias, poemas. Y los almanaques los acomoda para que no le falte tiempo a sus letras: “El tiempo de escritura de este libro es de tres años. La elaboración y la selección de los poemas fue muy minuciosa. Dado que me gusta pensar los libros como conceptos. Están elegidos con un criterio particular” decía y destacaba ese otro pilar para todo libro: la tarea de edición.
“Lo hice con la editorial SOPHIE de la ciudad de Chivilcoy donde me acompañaron en la edición y la corrección de la obra de una manera muy profesional y muy humana. Recomiendo recurrir a esta editorial por su calidez y su dedicación”.
Y haciendo referencia al título de la obra -“Fortunas y adversidades”- le pedimos precisamente una descripción personal de ese juego de palabras: “La primera de mis fortunas es estar vivo, tener la capacidad de amar y la necesidad de seguir escribiendo. Sería muy desdichado sin el amor y sin el arte. Siento que en mi obra sobrevuela una alegría que no es la alegría superficial del que ríe por todo. Es la alegría del goce y del deleite. Como quien disfruta un buen vino. El placer de crear una historia, de ganarme el poema a fuerza de escribirlo y de entender que el mundo -mi mundo- es un poco mejor luego de la concreción de la obra. Y mis adversidades por el contrario son la muerte, la idea de finitud. Pero esta no es tan grande como la idea de la finitud de quienes amo. La muerte de un ser querido es un poco nuestra muerte. La escritura me plantea adversidades que tengo muchas veces la fortuna de superar. Vivir es de alguna manera navegar entre la fortuna de estar vivo y la adversidad de vivir. También la concreción de un poema es la pequeña fortuna que hace que una tarde se justifique y a la vez conlleva la adversidad de un vacío inmediato que nos exige volver a crear”, decía.
Y agregaba: “El título lo elegí porque los poemas son de carácter históricos y narran con lenguaje literario sucesos de nuestra historia argentina. Si bien no busqué hacer un libro con rigor histórico, las historias que narro cuentan pasajes históricos muchas veces fundamentales, cómo por ejemplo la batalla de Caseros como eventos y personajes de segundo orden que si bien no figuran en los libros de historia, han contribuido al desarrollo de esta nación. Además hay historias plenamente ficticias que narran la idiosincrasia de nuestro país. La historia, para mí, es una rama de la literatura y como tal la escribo en carácter ficcional. Por eso ante todo mi libro es un libro de poemas literarios que tiene su raíz de la historia”.
Presentado ya entonces el libro, el autor señalaba su comprensible alegría por esta nueva obra literaria: “Tengo una inmensa alegría. Este libro es el primero de una serie de ediciones que vendrán dado que me propuse remediar mis seis libros anteriores”.
Luciano Cavido presentó su “Fortunas y adversidades”, un libro que le pone vida a los renglones para la invitación de las hojas y el encuentro de palabras. La invitación a leerlo, queda hecha.