Cuando el sueño empezó a hacer cosquillas, hubo risas de ansiedad y también esas risas que delatan el nerviosismo propio de semejante propósito… ¿Llegarían a cubrir los gastos que implicaba el alquiler de un salón para celebraciones? ¿Podrían además del casi inalcanzable alquiler solventar otras necesidades como las bebidas, las cosas ricas para comer, los regalitos para esos Peques que soplarían juntos celebrando sus cumpleaños del año en un solo día y en el mismo momento? Tantas dudas, pero mucha decisión.
Muchas ganas puestas de manifiesto y mucho trabajo previo de Alejandra, de su hija Luli, de su familia, de sus amigos, vecinos y colaboradores para que finalmente todo sucediera como se esperaba que fuera: un día soñado, un lugar mágico, las familias acompañando y ellos, los cumpleañeros, ni más ni menos que felices.
El día elegido varios meses atrás, fue el 28 de diciembre. Y desde ese mucho antes Alejandra Eugui referente del merendero “Piecitos Pequeños” del barrio Villa del Parque, no se quedó quieta y tejió la red más linda para conectar todos los detalles solidarios para el festejo a lo grande que se logró y que tuvo como lugar un reconocido salón de eventos de nuestra ciudad, donde además de los cumples, festejaron Navidad hasta con la visita de Papá Noel y todo.
Agradecimiento
“Tengo mucho por agradecer y no quiero olvidarme de nadie, pido perdón si lo hago” mencionaba Alejandra a la hora de dejar testimonio del gracias en su listado: “Gracias a las mamis Rocío y Mariana que amasaron las pizzetas, a Analía por las tartas dulces, a la tía de mis ‘Peques’ Ángeles que nos hizo las tortas de cumple y nos donó unos panchos, a Yammy por las mostazas. También gracias a Desarrollo que se sumó con gaseosas de naranja y una caja de Patys, a la panadería Dell Italia que nos donó unos pan dulce y masas secas, al señor comerciante que nos donó otras gaseosas de cola y salchichas, a Marcela que nos donó panes para los Patys, a Gabriela mami del merendero que me hizo los centros de mesa y el cartelito de Feliz cumples. A Ezequiel por la gran parte de golosinas, a Sol por los jarritos, al Kiosco ABC que hizo los calendarios para cada familia con las fotos de sus Peques, siempre haciéndome precio. A Cacho que en estos días me llevó a buscar cosas y ayer me hizo dos viajes para llevar todo al Salón Muna Eventos siempre cobrándome más barato. Todo lo comprado desde bolsitas, moños, servilletas, lo descartable y hasta los panes de panchos fue comprado gracias a las ferias por eso también gracias a la gente que siempre nos ayudan”, decía Alejandra con el corazón desbordado por todo lo vivido en la tarde del 28 de diciembre.
“Gracias a Caro que nos donó chupetines y caramelos para las piñatas y a Lau que fue una de las Seño que vino a las prácticas al merendero y compartió con su hijo este evento y también nos donó gaseosas”.
Y remarcaba su agradecimiento al espacio de eventos del que destacaba la amabilidad en la atención y el regalo de la propietaria: pochoclos y copos de nieve, a la vez que sumaba el agradecimiento para su amiga Anita y su esposo Ramón.
“Feliz de haberlo logrado y agradecida con toda la gente que me ayudó con donaciones. Hermoso festejo de cumple de todos mis Peques que jamás olvidaremos”, afirmaba.
Verdaderamente, no lo olvidarán. Será parte de esos tesoros que se conservan de la infancia y que le ponen un aire límpido a los días del después.
El Merendero “Piecitos Pequeños” retoma en febrero sus actividades y será entonces otro inicio de los más lindos sueños desde la realidad a la que a diario le pintan una cara de eterno feliz cumpleaños.