A horas de conocerse la noticia de que los rugbiers acusados del crimen de Fernando Báez Sosa podrían quedar en prisión domiciliaria, esta tarde se la vio a Julieta Rossi, la novia del joven asesinado, caminando por la zona céntrica de nuestra ciudad.
Sobre la causa, también circuló que la resolución avanzó y que los ocho imputados por el asesinato en Villa Gesell se habrían probado las tobilleras electrónicas y que sus domicilios estarían aptos para ser monitoreados.
Sin embargo, el abogado de la familia de Fernando, Fabián Améndola, desmintió ayer en el programa Intratables los rumores de prisión domiciliaria y dijo que desconoce quien hizo circular tanto el dato de la tobillera electrónica como el de los domicilios.
Esta posibilidad, igualmente, generó enojo y mucha impotencia en los allegados de Fernando Baez Sosa, que no entienden cómo habiendo tantas pruebas aún no haya Justicia.
A la joven, que iba a acompañada por dos amigos, se la vio por la calle San Martín, donde ya se pueden observar varios carteles que piden el esclarecimiento del hecho y condena para los acusados.
Durante su paso por Luján, vecinos y vecinas la reconocieron y se acercaron a saludarla solidarizándose con el caso que estremece al país.