Desde hace meses, la Asamblea Ambiental Luján viene desarrollando reuniones, presentando reclamos y manifestando su oposición a cualquier modificación de la ordenanza N° 6224, que prohíbe la instalación en el partido de Luján de industrias de tercera categoría.
Y en ese marco, ahora emitieron un comunicado en el que rechazan la decisión del intendente Leonardo Boto de enviar al Concejo Deliberante un proyecto para regularizar la central termoeléctrica de Araucaria Energy.
Al respecto, expresaron que “después de afirmar en dos medios de comunicación que era necesario revisar la ordenanza 6224 y blanquear la termoeléctrica, y sin recibir a los vecinos que desde hace tres meses vienen solicitando una reunión, el viernes 27 de mayo el intendente Boto presentó en el Concejo Deliberante un proyecto para habilitar la termoeléctrica que incluye una excepción a la prohibición de industrias contaminantes”.
En este sentido, apuntaron que “al tomar esta decisión el intendente Boto incurre en varias estafas”. Y detallaron que una de ellas “a las vecinas y vecinos a quienes acompañó en su reclamo contra la contaminación de la termoeléctrica antes de ser intendente. En ese entonces presentó un recurso de amparo para que la empresa no funcione, gestionó reuniones con diputados nacionales y realizó varias apariciones mediáticas declarando estar en contra de la termoeléctrica y prometió su clausura. Nadie sabe los motivos de su cambio de opinión ya que se niega a dar explicaciones a la comunidad”.
Por otra parte, desde la Asamblea hablaron de una “estafa a la comunidad al impulsar una ordenanza que inaugura un festival de excepciones a las normas que nos rigen. Excepciones al Código de Ordenamiento Urbano y excepciones a la ordenanza 6224 que prohíbe la radicación de solo el 5% de industrias más contaminantes en el partido de Luján. Todo con el único fin de habilitar un negociado que a nuestro pueblo no le deja un centavo ni nos inyecta energía. Por el contrario, Luján aporta millones de litros de agua diarios, y recibe a cambio contaminación atmosférica con emanaciones tóxicas y fuertes olores, contaminación sonora con ruidos molestos y contaminación térmica en las napas de agua con uso excesivo del recurso hídrico. Todo esto cerca de una escuela y de la población. Las penas son de nosotros, las vaquitas son ajenas”.
En otro párrafo, expresaron que “a pocos días de que hayamos conmemorado el 212° aniversario de nuestra Revolución de Mayo y en el marco del Día Mundial del Ambiente que será el 5 de junio, el intendente que prometió a la comunidad un Luján Limpio impulsa una estafa sin precedentes al intentar la habilitación de una empresa inglesa que está funcionando desde el 2017 clandestinamente”.
En esa línea, sostuvieron que “no queremos reeditar situaciones ya vividas en Luján, de empresas que se instalan y dejan un pasivo ambiental con daños imposibles de subsanar. Está en juego la calidad del agua que consumimos todas y todos los lujanenses. Tenemos memoria”.
“El lunes 6 de junio el Concejo Deliberante puede ser partícipe y cómplice de este fraude contra las vecinas y vecinos del Partido de Luján. O puede respetar las normas que nos rigen y que fueron impulsadas por las luchas de nuestra comunidad. En primer lugar, respetar la ordenanza 6224 y proteger el ambiente; en segundo lugar, ser coherente con la resolución 31/2018 que declara a la empresa Araucaria Energy S.A. persona jurídica no grata y defender nuestra autonomía, y por último atender la opinión del Consejo Urbanístico Ambiental, órgano consultivo de los concejales, que rechazó de plano el proyecto por razones jurídicas, ambientales y sociales: la termoeléctrica no tiene licencia para habilitarse en Luján”, añadieron en relación a la sesión a la que convocan a la comunidad y a todas las organizaciones sociales y políticas a asistir.
Por último, dijeron que “desde la Asamblea de Luján insistiremos con las causas que nos convocan. Defendemos la vida, la salud y el ambiente sano. Defendemos el trabajo digno y el desarrollo sustentable. No queremos que ninguna localidad o barrio de Luján se convierta en tierra de negocios para empresas que solo generan daño”.