El IOMA se comprometió con el Colegio de Farmacéuticos de la provincia de Buenos Aires a hacer un adelanto económico en los próximos días de $5.800 millones, sumándose así a la ayuda financiera de $800 millones que el gobierno de Axel Kicillof adelantará por la facturación que vence en diciembre. Esto busca aliviar el problema económico que enfrentan las farmacias debido a las condiciones de pago impuestas por los laboratorios proveedores.
La reunión se realizó este jueves entre las autoridades del Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA) y el Colegio de Farmacéuticos de la provincia de Buenos Aires (Colfarma), con el fin de acordar y comenzar a trabajar los procesos administrativos para la resolución del problema de financiamiento, para la provisión de medicamentos a las farmacias.
Allí acordaron que en los próximos días, además del desembolso de ayuda financiera por parte de la provincia de Buenos Aires, la obra social realizará un pago de $5.800 millones correspondientes a la facturación que vencerá en noviembre y diciembre.
“Es importante destacar que tanto el gobierno de la provincia de Buenos Aires como el IOMA están comprometidos en encontrar soluciones y apoyar a las farmacias en este difícil momento”, señalaron desde la obra social.
Ayer el gobierno de Axel Kicillof anunció que va a desembolsar $800 millones de pesos como adelanto de la facturación de medicamentos con vencimiento en diciembre para las farmacias integrantes de la Red Colfarma, con el fin de ayudarlas a superar la situación financiera, sobre todo a las consideradas pequeñas y medianas, ya que muchos de estas farmacias no pueden afrontar el pago que les imponen los laboratorios si o si a pocos días.
“Ante esta situación, el gobernador bonaerense Axel Kicillof decidió intervenir y brindar un apoyo financiero para las farmacias. Este desembolso será de gran ayuda para que estas puedan hacer frente a sus compromisos financieros y económicos”, indicaron desde el IOMA.
Por otra parte, también IOMA y Colfarma se comprometieron a modificar los acuerdos vigentes, para lo cual los equipos técnicos profesionales de ambas instituciones mantendrán reuniones de trabajos semanales para realizar los cambios de gestión administrativas con el objetivo de acortar los plazos de presentación y pago de facturaciones.
Tras la reunión, la presidenta de Colfarma, Alejandra Gomez, expresó que “se acordó llevar adelante una agenda de trabajo conjunta” y “la modificación de los plazos de pago, acortando los tiempos de cobro” para que las farmacias bonaerenses puedan prestar el servicio farmacéutico en toda la provincia a las y los pacientes del IOMA, “garantizando accesibilidad a los medicamentos y la integridad de los recursos económicos, tanto de las farmacias como de la obra social” .
Por su parte, el presidente de IOMA, Homero Giles, consideró que “la salud no puede ser tratada así, el acceso a la salud es un derecho y por eso tiene que ser regulada por el Estado porque es el único que garantiza la equidad y la igualdad. En este caso la equidad en cuanto a la administración y entrega de medicamentos”.
Y añadió que “a los medicamentos tienen que acceder todas las personas que lo necesiten. Por eso no se puede dejar que sea el mercado, la ganancia, la especulación, quien regule. Porque siempre hay uno que tiene una posición privilegiada, con mayor fuerza, en este caso los laboratorios, y que las ejercen de manera egoísta, y hace que ponga en riesgo todo el resto de la cadena, que son la sobrevivencia de las farmacias y la posibilidad de que las obras sociales y prepagas, toda la seguridad social, garantice la accesibilidad de medicamentos para los afiliados”, enfatizó Giles.
Respecto del problema, desde el IOMA sostuvieron que “surge a raíz de los plazos y condiciones de pago que los laboratorios exigen a las farmacias. Muchas de ellas, especialmente las pequeñas y medianas, no tienen los recursos económicos necesarios para cumplir con estas obligaciones en el plazo establecido. Esto ha llevado a una situación complicada en la provisión de medicamentos, afectando directamente a las personas afiliadas que dependen de las farmacias para continuar con sus tratamientos”.
Las farmacias bonaerenses, que en la provincia de Buenos Aires alcanzan a unas 4.600 de las cuales un 90% están en el rango de medianas o pequeñas, a través de Colfarma que las representa, habían señalado días atrás que “no podían sostener la actividad dado que las financiadoras reintegran el monto de las ventas entre 60 y 90 días” después de concretada la venta en mostrador, lo que implica “algo muy costoso en este contexto” para que sea sostenido por la farmacia comunitaria.
Ahora se espera que “las farmacias puedan continuar con la provisión de medicamentos a las y los afiliados sin interrupciones y poder cumplir con los pagos y obligaciones que tienen con los laboratorios proveedores”, completaron desde el IOMA.
